Thursday 26 December 2024


Dos familias mexicanas poderosas desafían oligopolio del cemento

Monday, September 19, 2016

 

Dos de las mayores fortunas de México sostienen Elementia, dueña de Cementos Fortaleza. Carlos Slim, el hombre más rico del país, y la familia Del Valle, décima en la lista de la revista Forbes, unieron sus fuerzas en 2009 para poner en pie un nuevo jugador en la industria de la construcción.

El saldo por ahora es de 26 plantas en nueve países, unas ventas de $253 millones de dólares en el segundo trimestre y haber situado a una de sus divisiones en la quinta plaza en el escalafón del cemento mexicano, un mercado hermético durante más de 70 años, informa el dario español El País.

Frente a Fortaleza está Cementos Mexicanos (Cemex), una de las banderas económicas del país. Con más de un siglo de historia, la tercera cementera del mundo ha mantenido el sector mexicano casi como su coto privado, copando cerca de la mitad del mercado y relegando al resto de sus cuatro competidores a un papel residual.

Ni siquiera los dos grandes gigantes, la suiza Holcim y la francesa Lafarge —recientemente fusionados—, consiguieron erosionar el apabullante dominio de Cemex.

Desde los años cuarenta no aparecía un nuevo actor en escena. La brecha en el antiguo régimen del cemento no se abrió hasta que el nuevo príncipe del dinero mexicano se alió con otra de las fortunas tradicionales.

Slim y Del Valle, al frente de dos potentes grupos con tentáculos en varios sectores, suman juntos casi $80 mil millones y se han propuesto ensanchar las grietas en el muro de hormigón.