Titubeos de la Sica

 

Es casi seguro que Honduras no será parte de la Secretaría de Integración Centroamericana, Sica, de la que fue expulsada después del golpe en junio de 2009. Si lo logra en la reunión que celebran en San Salvador los presidentes del istmo, será un milagro. 

 

Los jefes de Estado de Nicaragua, Daniel Ortega, y el de República Dominicana, Leonel Fernández, no estuvieron presentes, lo cual es un nuevo obstáculo porque el ingreso al organismo debe ser por unanimidad. La actitud negativa de Ortega y Fernández era de esperarse, pues ambos responden a los dictados de Chávez y Lula da Silva.

 

En la inauguración Funes dijo que a El Salvador le urge relanzar la integración de Centroamérica para enfrentar fenómenos naturales, el cambio climático, inseguridad, tráfico de personas, de droga y de armas, pandillas y epidemias.

 

Pero recuérdese que Funes fue, en la cumbre anterior del Sica celebrada en Panamá, quien dijo que nuestro país no sería aceptado, a pesar de que Ricardo Martinelli y Álvaro Colom habían lanzado las campanas al vuelo al concluir la cita.

 

En definitiva, Honduras sigue afuera del proceso integracionista y por más vueltas que den el presidente Porfirio Lobo y el canciller Mario Canahuati, eso va para largo. La impresión que causa esta espera infinita es que en el trasfondo no hay voluntad de los mandatarios en firmar el acuerdo, no sé por qué causas y por influencias de quien.